Vistas de página en total

lunes, 13 de noviembre de 2017

"Diles que tú eres poesía y que con mi voz pronunciarás tu nombre."

Una fría noche de otoño, se había terminado otro corto fin de semana. Era lunes y faltaban unas excasa 5 horas para que el despertador me taladrara el oído. Íbamos a dormir nuestra última noche juntos hasta la siguiente semana, pero no quería que acabase el día, quería alargarlo un poco más. Nos burlamos el uno del otro, nos hicimos cosquillas, finísimos enfadarnos, hicimos un poco el payaso,.. Reímos. Hacia ya mucho que no me dolía la cara de tanto reír. Y sin pensarlo, nos besamos. Y seguimos. Y nos desnudamos, no sólo la ropa, si no en alma. Hacia ya tiempo que no me sentía tan bien como en ese momento. Me sentía bien, como si nada malo me ocurriese en mucho tiempo, como si solo existiésemos los dos, eso seria maravilloso. Él es maravilloso, aunque a veces se me olvide cuan increíble puede llegar a ser en todos los aspectos de un ser. Inevitablemente le quiero, con todo lo que queda de mi alma rota. E, inevitablemente, le dije "te quiero". Por primera vez en mi vida, por primera vez sin miedo. Y fui la mujer más feliz del mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario