
La improvisación, el tomar decisiones repentinas, el sorprender; eso determina la vida que vas a llevar. Gracias a no pensar demasiado, a veces, suceden las cosas más emocionantes. Lo que era ordinario se vuelve extraordinario con tan solo elegir correctamente con quien hacer de un momento algo inolvidable. Transformar una noche que significa brillos, baile, ropa nueva y litros de alcohol en una noche como otra cualquiera y que, con creces, supere a cualquier expectativa de una Noche de Fin de Año, eso supera el límite de la felicidad. Despertarse un día 1 de Enero sin resaca ni dolor de pies, con sueño pero con la felicidad en la cara y tu futuro a tu lado regalándote la primera sonrisa del día, sin duda alguna no existe un mejor comienzo.
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