Gracias, por cada día conmigo. Por no abandonar, por no rendirte. Gracias, por cada palabra. Porque siempre tienes algo bueno para decir, aunque no lo merezca. Gracias, por cada abrazo y cada beso. Llegan cuando más los necesito. Gracias, por cada "buenos días". Hacen que los días sean un poco mejores. Gracias, por soportarme incluso cuando ni yo lo hago, por quererme incluso en lo peor de mi. Gracias, por apoyarme. Sin ti nada seria posible. Gracias, por no dejar que me hunda, por hacerme ver que siempre hay un camino, que vas a ayudarme. Gracias, por cada segundo que me dedicas para hacerme reír o sacarme una sonrisa. Porque es tuya. Gracias, por hacerme sentir la persona con más suerte del mundo. Simplemente por haberte conocido. Gracias, por aparecer en mi vida, por darme vida. Gracias, por cada gesto. Gracias, por quererme, por recordarmelo todos los días sin faltar uno. Gracias, por todo. Y gracias, por hacer que la palabra "gracias" se quede completamente escasa para agradecerte cómo eres. Te quiero, de aquí a donde nadie conoce.
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